Antoni Solivellas Estrany, alcalde de Escorca, nos adentra en la situación actual de su municipio. Dicen que un hombre es el lugar en el que se encuentra y Antoni Solivellas está, desde el 2011, al frente del Consistorio de Escorca. Solivellas es fiel reflejo de la generación nacida en la década de los años 70. Los orígenes de Antoni Solivellas, que cuenta con sus ocho apellidos de la Serra de Tramuntana, junto con su temprano interés por la política, centran sus actuaciones en las personas. Sus vecinos de Escorca son los grandes beneficiarios. Así las poblaciones de Escorca, Lluc, Cala Tuent y Sa Calobra han visto como Solivellas recogía recientemente en los XI Premio la Razón el galardón al “Municipio Turístico en Destino Sostenible.
¿Cómo describiría la situación actual y cuáles son los mejores embajadores de Escorca?
Destacaremos la apuesta que está realizando el Ayuntamiento de Escorca en la gestión sostenible en el municipio.
Trabajamos de una manera sostenible para que se pueda recuperar la vida rural de este municipio que está muy castigado por las prohibiciones impuestas por el Govern.
Estamos luchando para intentar mantener lo que realmente es la razón de la Declaración de Patrimonio Mundial de la Serra de Tramuntana que ha sido la huella que ha dejado el hombre en un paraje natural que ha estado muy integrado.
Nuestro Modelo de Gestión fue pionero en las Illes Balear remontándose a mucho antes de las modas sostenibles. Nuestro mayor empeño nos posiciona en potenciar las regulaciones y actuar como gestores. Nos diferenciamos así de las medidas impuestas por la Administración del Govern de las Illes Balears centradas en las prohibiciones y sus consecuentes sanciones. Medidas que hemos criticado de manera activa desde este Consistorio.
La recuperación de fincas y de olivares son otro de los elementos destacados que repercuten en nuestro prestigio e identidad internacional, convirtiéndose en nuestros grandes embajadores.
¿Qué destacaría de su gestión ?
A nivel social y económico desde el Ayuntamiento de Escorca hemos intentado estar cerca de nuestros vecinos.
Estamos completamente en contra de la legislación de prohibiciones que ha hecho el Govern de las Illes Balears. Ha afectado a la vida rural y las fincas, que están prácticamente abandonadas ya que las personas que tienen una propiedad se dedican básicamente a mantener las fincas, sin poder obtener ningún retorno de la inversión.
Entre estas prohibiciones, ampliamente denunciadas por nuestro consistorio, destacamos:
No se puede hacer alquiler vacacional en ninguna casa de posesión o alojamiento alguno.
Con la Ley de Agricultura se anuló la anterior Ley que permitía las agro estancias. La actual permite menos agro estancias y lo que no se ha hecho ha sido desarrollar el Reglamento que permita que se den las autorizaciones. Esto se traduce en que desde que salió la nueva Ley de Agricultura no hay un Reglamento y por tanto no se pueden dar autorizaciones y por el momento no se ha dado ninguna. Por lo que se continúa parando el proceso.
Se ha complicado el que se pueda hacer un agroturismo de manera que se ajuste a los estudios de impacto ambiental e interés general.
Nuestra gestión se centra en regular y apostamos por vender experiencias rurales. Una combinación de turismo en el que se pueda vivir en familia en una finca y que pueda vender esta experiencia de estar en una finca, ver la vida rural, participar en esta vida rural proporcionando unos ingresos a los propietarios.
¿Cuáles son las medidas adoptadas por el Consistorio de Escorca?
Hemos sido el primer municipio en poner normas para regular un máximo diario en la presencia de autocares en Sa Calobra, de igual manera anunciamos que saldrá en pocos días una aplicación en la que damos información a todos los usuarios que van a Sa Calobra y a Cala Tuent de manera que puedes consultar las plazas disponibles.
Al ser partidarios de la regulación y de poner los medios para que esta relación funcione, potenciamos la colaboración cívica y el regreso a las tradiciones.
No somos partidarios de poner prohibiciones, que es una cosa que se ha hecho mucho en la Serra de Tramuntana. Prohibiciones unidas a sanciones económicas, que no solucionan nada.
Destacaremos que municipios como Escorca no reciben ni un céntimo de euro de una recaudación turística, cuyo principal objetivo es preservar el impacto turístico, en un entorno tan especial como la Serra.
El respeto por la tradición, el medio ambiente y el potenciar la economía circular de nuestro entorno culmina en que parte de la recaudación la destinamos a la recuperación de fincas. Ahora estamos trabajando en recuperar los olivares de Cala Tuent.
Finalizamos nuestra entrevista rodeados de las maravillosas vistas de la Serra de Tramuntana. El Ayuntamiento de Escorca, situado en Lluc, estrena su nueva calificación energética, la A. Otro logro de este consistorio capitaneado por Solivellas, que ha conseguido reformarlo convirtiéndolo en referente de sostenibilidad y autosuficiencia energética.