El presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, y el conseller de Turismo, Cultura y Deportes del Govern, Jaume Bauzà, han abierto el nuevo carril para bicicletas y peatones, que tiene un presupuesto total de 3,7 millones

El nuevo vial cívico que enlaza los municipios de Binissalem, Lloseta e Inca es ya una realidad. Hoy, el presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, ha inaugurado esta infraestructura que es uno de los proyectos estrella del Plan de Viales Cívicos para fomentar la movilidad sostenible en Mallorca impulsado por la institución insular. El carril para peatones y bicicletas inaugurado hoy tiene un presupuesto de 3,7 millones y una extensión de tres kilómetros.

Nuevo vial cívico sufragado con 2 millones del Impuesto de Turismo Sostenible

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El acto de inauguración ha contado con la presencia del conseller de Turismo, Cultura y Deportes del Govern, Jaume Bauzà, puesto que el proyecto ha sido financiado con dos millones por el Impuesto de Turismo Sostenible (ITS). El resto del coste de obra hasta llegar a los 3,7 millones, así como la ejecución de la infraestructura ha corrido a cargo del Consell de Mallorca. La Comisión de Impulso del Turismo ha considerado que el proyecto de vial cívico entre Inca, Lloseta y Binissalem fomenta la «movilidad y el turismo sostenible, contribuye a la desestacionalización ya la creación de productos turísticos practicables en temporada baja». Galmés y Bauzà han descubierto una placa conmemorativa de la inauguración. Durante el acto han estado acompañados por el conseller insular de Territorio, Movilidad e Infraestructuras, Fernando Rubio, y los alcaldes y concejales de los tres municipios por los que discurre la infraestructura.

El presidente Llorenç Galmés ha destacado que «este es un proyecto iniciado y terminado esta legislatura, lo que demuestra nuestra apuesta clara por la movilidad sostenible desde el primer momento que llegaremos al Consell de Mallorca». Galmés ha añadido: “Hoy es un día importante para los municipios de Binissalem, Lloseta e Inca, ya que estarán mejor conectados con esta vía para ciclistas y peatones. Se trata de uno de los proyectos clave de nuestro Plan de Viales Cívicos que tiene un presupuesto de 45 millones y supondrá más de 60 kilómetros de rutas cívicas entre los municipios de Mallorca. Un proyecto cofinanciado por el Impuesto de Turismo Sostenible y el Consell de Mallorca que supone una mejora muy importante para la comarca del Raiguer”.

El presidente Llorenç Galmés ha aprovechado también para anunciar que está previsto iniciar las obras durante el primer trimestre del próximo año del vial cívico entre Inca y el hospital para garantizar la seguridad de los usuarios que ahora deben transitar por la carretera.

Por su parte, el conseller Jaume Bauzà ha explicado que “el objetivo del Impuesto de Turismo Sostenible es que lo que se recaude repercuta directamente sobre la gente de nuestras islas. Este proyecto de vial cívico es un claro ejemplo de mejora de infraestructuras en beneficio de los ciudadanos y, además, contribuye a la desestacionalización con un producto turístico practicable en temporada baja como es el cicloturismo”.

Descripción del vial cívico entre Binissalem, Lloseta e Inca

La obra consiste en la construcción de un paseo cívico que une el vial ejecutado en las obras del enlace a Lloseta desde la Ma-13 (autopista) hasta llegar al núcleo urbano de Inca. El punto de inicio del nuevo paseo se ubica en el lado norte de la carretera Ma-13 A, a la altura de la zona denominada del edificio del Foro de Mallorca. Desde aquí se construye un vial de características similares al que se ejecutó antes, con 2,50 metros de ancho libre de pavimento de hormigón, separación física de la carretera con barrera mixta acero-madera, bermas de 75 cm, y reposición de cierres laterales. A la altura del punto kilométrico 0,3 del nuevo vial se coloca una pasarela de madera de unos 20 metros de longitud para salvar el paso sobre el torrente de Aumadrà.

Vial Cívico del Hospital de Inca

El hospital de Inca, en la actualidad, no cuenta con un acceso directo desde el casco urbano para peatones, que deben ir por la estrecha calle Llubí, un itinerario compartido con los vehículos, lo que puede generar situaciones de peligro peatonal y bicicletas que circulan por él para llegar al hospital. La adjudicación de esta obra se paralizó en 2021 por deficiencias que ahora ya se han resuelto. Está previsto iniciar su construcción en el primer trimestre de 2025. Tiene una extensión de unos 800 metros y un presupuesto de 500.000 euros.